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Florentino Pérez: “Nos negamos rotundamente a jugar en EE UU; no sé a qué intereses responde”

El presidente del Madrid defiende la reforma del estadio y asegura que salvó al club a su llegada en el año 2000 avalando 147 millones de su patrimonio personal

Florentino Pérez, durante la Asamblea.Vídeo: CARLOS ROSILLO / atlas

Desde su regreso a la presidencia del Real Madrid en 2009, Florentino Pérez nunca había acumulado más prestigio ni más poder, ni se había enfrentado a una asamblea de socios compromisarios tan espinosa como la de este domingo. El dirigente, acostumbrado en los últimos años a reuniones amables, sin más historia que la de dar el visto bueno a las cuentas anuales del club, convocó este domingo una sesión extraordinaria para someter a votación el endeudamiento por 575 millones de euros a un plazo máximo de 35 años para financiar las obras de remodelación del Santiago Bernabéu.

Florentino Pérez sacó adelante la votación de su proyecto más controvertido con una puesta en escena inusualmente agresiva. Riñó a los socios que le criticaron advirtiéndoles de que no estarían ahí de no haber sido porque salvó al club de la ruina hace 18 años, y ajustó cuentas con Javier Tebas, el presidente de LaLiga, negándose "rotundamente" a que el Madrid juegue partidos en Estados Unidos, tal y como propuso el jefe de la patronal.   

La necesidad de solicitar un crédito para las obras del estadio, tras la espantada del fondo de inversión IPIC que se comprometió a financiar con 400 millones las obras de Chamartín, generó cierta controversia en la masa social. El endeudamiento, de cuatro veces el EBITDA, comprometerá la economía del club durante las próximas generaciones de socios. Los compromisarios, que representan en torno a un 3% de todos los miembros del club y de los cuales acudieron a la cita la mitad, dieron vía libre al plan de Pérez con un 92,7% de los votos a favor.

El resultado de la consulta contrastó con la contundencia que mostró Pérez en su discurso. La oposición, al menos en la reunión, fue apenas relevante y le reclamó que asumiera la deuda con su patrimonio personal. "Me gustaría decirle a los que dicen que soy rico, que financie yo la obra, que pueden hablar gracias a que yo, cuando vine en 2000, avalé 147 millones de euros. Y lo hice porque la deuda era enorme y los gastos eran mayores que los ingresos. Que esos señores que se meten conmigo, sepan que ahora no podrían hablar", espetó el presidente del club a los críticos que ponían en entredicho su gestión económica. Algunos más solicitaron que la votación se ampliase a la totalidad de los socios. "Los estatutos dicen que es nuestra responsabilidad, de los que estamos aquí, tenemos la representatividad legal de todos los socios", respondió el presidente.

"Alguno ha dicho que no necesitamos un estadio, por esa gente seguiríamos jugando en O’Donnell [estadio del Madrid entre 1912 y 1923]. En otro asunto, actúo de presidente para todo, también para erradicar la violencia, y eso tuvo un coste para mí. Acabé con la violencia. Me pintaron la casa y hasta la tumba de mi mujer, que nunca lo había dicho hasta hoy. Tenemos que desenmascarar a los que van a por nosotros, uno se cansa de que nos contamine esa pequeña marea que va contra los intereses del Madrid", expresó con cierta quemazón Florentino Pérez.

Al margen del apartado económico, las escasas voces críticas con la gestión del presidente blanco se centraron especialmente en el plano social. Algunos de los intervinientes exigieron respuestas en torno a la financiación y los supuestos privilegios de los que goza la grada de animación, a los que acusaron de ser financiados para viajar a la final de la Champions de Kiev por solo 500 euros. "Hay socios que están pillando del club por hacer la grada de animación. Todos los socios iguales, las peñas también. Esas dos peñas que organizan motu proprio y lo paga el club. No puede haber socios con privilegios", expresó el socio número 1.766. Pérez negó que se financiara a la grada que ocupa el fondo sur. "Del Madrid no sale un duro. Se autofinancian". Otras voces apuntaron a la subida del precio de los abonos, a las escasas ayudas en la organización de desplazamientos y a los repartos de entradas de cara a las finales. 

En el ámbito estrictamente deportivo, Florentino Pérez se acordó en su discurso inicial de Zinedine Zidane y Cristiano Ronaldo. "Ha entrado en la historia como uno de los grandes con nueve títulos. Algo que nadie ha conseguido. Es uno de nuestros mitos. Esta será su casa para él", dijo sobre el francés. "Y también para Cristiano, que ha sido un referente mientras ha vestido la camiseta del Madrid. Su paso será contado de generación en generación. Es un ejemplo para todos los que se ponen esta camiseta y los que quieran ponérsela en el futuro. Muchas gracias, Cristiano", le reconoció al actual atacante de la Juventus. No se olvidó tampoco del jugador de baloncesto Luka Doncic tras su marcha a la NBA. "Se ha formado con nosotros como jugador y como persona. Ahora emprende una nueva aventura en la NBA, tras ser elegido como mejor jugador de Europa con sólo 19 años. Gracias Luka".

Otra de las cuestiones a las que hizo referencia el presidente madridista fue a la posibilidad de que LaLiga dispute partidos en Estados Unidos. Florentino Pérez mostró su rechazo a la idea de Javier Tebas. "Nos negamos rotundamente a jugar en EE UU; no sé a qué intereses responde, pero desde luego no a los de los clubes y los aficionados", aseguró.

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