España

El Gobierno acusa a Torrent de ser "correa de transmisión" del independentismo

POLÍTICA

Roberto Bermúdez de Castro, secretario de Estado para las Administraciones Públicas, en el Senado. Juan Carlos HidalgoEFE

El Gobierno, por boca del secretario de Estado de Administraciones Territoriales, Roberto Bermúdez de Castro, ha acusado al presidente del Parlament, Roger Torrent, de ser "correa de transmisión del independentismo". Se ha pronunciado en estos términos ante la Comisión Conjunta de las Comisiones General de las Comunidades Autónomas y Constitucional del Senado, donde ha comparecido para informar del desarrollo y aplicación de las medidas adoptadas al amparo del artículo 155 en Cataluña.

Bermúdez de Castro se ha referido al pleno convocado para esta misma tarde por Torrent con el fin de investir por vía exprés a Jordi Turull como presidente de la Generalitat asegurando que se trata de una decisión "arbitraria y que obedece a intereses sectarios" que, según el Ejecutivo, "nada tienen que ver con los intereses generales de todos los catalanes".

El secretario de Estado, dependiente de la vicepresidenta del Gobierno, ha hecho hincapié en que Torrent ha actuado con "una falta de transparencia incompatible con su cargo abusando de los procedimientos y de los derechos que asisten a los grupos parlamentarios".

Bermúdez de Castro ha insistido en que desde los más diversos ámbitos de la sociedad catalana que tenga "altura de miras para representar a todos y no sólo a los suyos". En definitiva: "Que devuelva la dignidad al Parlamento de Cataluña".

Para el Gobierno, tal y como ha señalado, la maniobra de convocar el pleno de investidura urgentemente antes de que se sustancia la comparecencia de Turull ante el juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, es "un paso más en la estrategia independentista de confrontación con el Estado". Ha sido ahí cuando Bermúdez de Castro ha advertido al secesionismo de que "no debe olvidar que el Estado democrático y de derecho ha dado muestras suficientes de su capacidad para defenderse". "Y tampoco", ha añadido, "que esta estrategia va en contra de una gran parte de la sociedad catalana que no comparte su ideario".

"Quien aspire a la Presidencia de la Generalitat", ha insistido, "debe estar libre de procesos judiciales, de los vinculados al procés y de cualquier otro". Y esto es así porque, según el Gobierno central, "Cataluña ha sufrido mucho quebranto en los últimos años y no puede ser sometida al riesgo de una inhabilitación de su presidente. Sería", ha concluido, "un golpe muy duro para su estabilidad, para su prestigio y para la dignidad de las instituciones".